ESTUDIO PARA NO ERA TRISTEZA

Con este retrato pretendo capturar un instante íntimo de recogimiento. Un joven con la mirada baja y el rostro tenso, suspendido en un pensamiento que no se dice. Compuesto por una paleta de tonos rosados y suaves para delatar su fragilidad emocional. Una atmósfera de melancolía serena. La expresión contenida sugiere un peso interno, algo no resuelto. algo que simplemente es. Con esta obra pretendo invitar al silencio, a mirar con calma y reconocer en otros, y en uno mismo, ese lugar en el que se esconden las emociones cuando aún no tiene  forma.